Autoconclusivo: Last days of dancing

Meelike y Karma Meelike estaban paradas en medio de un desierto blanco de nieve. Estaban en otra dimensión, el poder de ambas era tanto que la energía de sus manas azules crearon un tiempo-espacio completamente nuevo, aunque pasajero. La vencedora saldría a la realidad una vez más bajo el título de la verdadera Meelike.

Los cuernos de hielo de Meelike se rompen, solo para demostrar una hermosa y fuerte cornamenta de verdad. Su cabello era plateado y sus ojos eran azul claro, con un dejo de brillo.

Meelike observa sus manos y su cabello, ante la mirada horrorizada de Karma Meelike. Lo había conseguido, se había transformado en el mítico Reno de Hielo.

-Eres una tonta, no eres nada especial. Todos los renos místicos pueden hacerlo sabiendo entrenarse. Tú no fuiste digna de hacerlo más que con el sacrificio de un elfo.
-No, tú no entiendes. Ya podía hacerlo, solo era cuestión... de tener una razón para hacerlo...

Karma Meelike se teletransporta en frente de Meelike y tira un fuerte puñetazo a su rostro, pero Meelike ya no había estado ahí.

-Mis poderes han regresado.
-No... ¡ESO NO!



Llamaradas de fuego aparecen detrás de Karma Meelike, mientras que su cabello negro se torna naranja y sus ojos negros en rojos. Una llama infernal brilla entre sus cuernos. La chica lanza una ola de fuego hacia Meelike que instintivamente cerró los ojos e interpone sus brazos para protegerse. Un ataque mortal, pero para su sorpresa, sobrevivió. Le dio mucho calor nada más. De repente cae Karma Meelike del cielo dándole una patada en el rostro.

-Te equivocas, esto va a terminar. Hagámoslo rápido, lo puedo hacer indoloro si quieres.

Meelike grita cargando su mana, un hermoso copo de nieve "gigante" se forma entre sus cuernos mientras torres de hielo se forman detrás de ella.

Emma Mayflower y la paciencia:
Gran parte de crecer como un mago en este mundo es saber aterrizar las ambiciones y pensar más allá en que puede hacer la magia por ti. 


Siempre traté de seguir ese camino, pero jamás logré cumplir con mi objetivo, y eso me llena de mucha pena, y es que al final de cuentas, dependí mucho de la magia para todo. Y sin embargo, cuando ella robó mis poderes, comencé a ver la vida de otra manera.


Meelike se lanza hacia Karma Meelike con una serie de movimientos acrobáticos y la impacta con un talonazo en hombro. Karma Meelike esperaba que la atacara con magia o algo parecido, así que un ataque físico de lleno no lo espero. Meelike le toca el pecho.

Mana Azul
*Timer Clock*

Karma Meelike es rodeada por una burbuja azul, pero nada ocurre.

-Eres una estúpida... no sabes ni usar tu propia magia.

Karma Meelike se preparaba para juntar fuego en sus manos, pero justo en ese momento, Meelike observa como su doble se congela en el tiempo.

Timer Clock es una técnica trigger en la que el oponente se congela en el tiempo cuando intenta usar mana cuando está dentro de la burbuja.

Eso fue demasiado fácil, ahora podía aprovechar y clavarle su espada en el pecho, pero no dejaría que todo ese sacrificio se hubiese dado para un acto tan cobarde. Había que pelear con honor, para enaltecer el nombre de los caídos.

En todo caso, se quedó ahí, viéndola. Era exactamente igual a ella, solo que su sentido de autopercepción era un poco diferente. Ella era más extrovertida, mientras que Meelike era más conservadora. Si no fuese que tuvieran que pelear a muerte, le gustaría saber quién es ella, qué la motiva, qué quiere de su vida. ¿Era completamente igual a ella? ¿O tal vez estaba interesada en otras cosas como los deportes o los videojuegos? ¿Comía carne fuera de sus rituales de absorción de poderes?

Myla y el coraje:
¡Me quedaré contigo!

A pesar de ser tan pequeña, siempre tuvo el valor de enfrentar a enemigos con los cuales no tenía ninguna oportunidad, y sin embargo, siempre salió bien librada. Es una cuestión de determinación, de conocer tus fortalezas y tus debilidades, y ella conoce las suyas. Myla, gracias.

La fortaleza de Meelike no era ni la batalla y tampoco el mana azul, sino su capacidad de análisis y razonamiento. Por eso fue seleccionada como la líder de Athar.

Se posiciona frente a ella, justo donde estaba antes de que comenzara a cargar su mana. Invoca su espada. Estaba lista.

La burbuja azul estalla y Karma Meelike se había recuperado sin darse cuenta de lo ocurrido.

Mana Amarillo
*Fire Wall*

Una potente llamarada sale disparada hacia Meelike.

Kodran Söderkvist y el orgullo:
Cuando usan una espada a una mano, los darkha acostumbran llevar una daga, nosotros, al igual que ellos podemos hacerlo, sin embargo, también podemos cargar con magia.


Siempre traté de ser muy modesta, pero sé que a veces fui muy presumida, pero siendo honesta, esos pequeños logros eran fruto de mucho esfuerzo. Kodran siempre fue muy fuerte, quizás alguien con el que nunca me hubiese gustado pelear, ni siquiera bajo estas condiciones. El aura que emana de tener tanta seguridad en sí mismo es ya de por sí aterradora. Quizás menos dudas y más confianza en mí misma causarían el mismo efecto.

Meelike tenía cerca de un minuto cargando mana, esperando a que se reventara la burbuja.

Mana Amarillo
*Aus Onus*

Una fuerte ventisca desvía el muro de fuego que se dirigía hacia Meelike. Karma Meelike estaba confundida, pero la técnica que le había enseñado Kodran había tenido esa ventaja, mas la suma de un toque personal. Mientras Karma Meelike se cubría de la ventisca, pequeños copos de nieve se incrustaban en sus brazos, causándole pequeñas heridas. Meelike se abalanzó con una fuerte patada con su espada cargada de mana negro.

Mana Negro
*Baltic Star Iris*

Los espadazos de Meelike eran más como un latigazos. Era el mana negro el que hacía el daño, no la hoja de la espada. Cuando estuvo a punto de dar un golpe final característico de su técnica, cambia inmediatamente de hechizo.

CANCEL
Mana Negro
*Fasce Nox*

Con esta técnica, Meelike le dio tres espadazos más a Karma Meelike con el mismo efecto de la técnica anterior, pero los golpes eran más fuertes y certeros. Tanto, que la lanzaron por los aires por varios metros. Karma Meelike cae el piso cubierto de nieve, con un fuerte grito de dolor.

-¿Sabes? No sé que atrocidades cometiste bajo mi nombre, pero reconocí algunos lugares en los que estabas: Letonia, Lituania, hasta Polonia. ¿De verdad tenías que darme una reputación de jetseter dominadora de drug dealers? Dame una oportunidad, ambas sabemos que podemos salir en una noche caprichosa con el dueño de Audi o algo parecido, y al final ni siquiera nos tendríamos que haber acostado con nadie, solo con iluminar sus miserables vidas es más que suficiente.

Meelike se aproxima a donde había caído Karma Meelike. Ya no estaba ahí. De repente, unas cadenas de hielo la inmovilizan completamente.

Karma Meelike respira pesadamente mientras que con mana blanco comienza a sanar sus heridas. Sorprendida se da cuenta de que no sanan tan rápido como debería. El ataque de Meelike con mana negro había sido superior.

-No me menosprecies. Ese siempre fue tu problema, siempre te sentiste en la cima de una élite que solo existía en tu mente, pues nadie reconocía tus supuestos triunfos. Estar con los de abajo, en cambio, te puede enseñar un par de trucos hábiles.

Karma Meelike saca una navaja suiza y jala la cuchilla más grande. Meelike veía horrorizada mientras se trataba de zafar pero mientras más trataba de zafarse, más fuerte apretaban las cadenas.

La cuchilla en la mano de Karma Meelike se aproxima al corazón de su prisionera. Acabaría con todo de una vez. Meelike no tiene tiempo y crea una gruesa capa de hielo en su pecho. 

La cuchilla se queda clavada en el hielo y Karma Meelike mira sorprendida.

-Tienes razón. Matarte de inmediato sería aburrido. Recuerda que soy tu karma, debo recordarte que... No debiste de haber hecho eso.

Karma Meelike de inmediato clava la cuchilla en el hombro derecho de Meelike quien se retorcía de dolor y se quejaba. Karma Meelike lo repite con su hombro izquierdo. Meelike trataba de zafarse pero las cadenas la apretaban más, pero mientras luchaba, Karma Meelike le acuchilla la pierna derecha.

No puedo zafarme... ¡Tengo miedo!

Liam Blake y la perseverancia:
¿Quién dice que no va a incrementarse nada entre ustedes? No te ha rechazado, si él te dijo que quería seguir saliendo contigo entonces no veo el problema. Seguro a él también le gustas, pero los hombres se toman su tiempo.

Aún puedo salvarme, ella también tiene miedo, lo puedo ver en sus ojos. Si aún no me ha matado es porque aún tengo una oportunidad de salvarme. Solo debo seguir intentando, aún más y más fuerte. La maldad cae bajo su propio peso.

Mana Amarillo
*Ice Bending*

Antes de que Karma Meelike le encajara la cuchilla en su otra pierna, Meelike expulsa el hielo de su pecho hacia el rostro de Karma Meelike y rompe las cadenas bajo un potente grito. Se soba un poco donde las cadenas le apretaron más. Sabía que normalmente no podría enfrentarse contra su versión kármica por si sola, que un fuerte espíritu la estaba ayudando, pero aún así, se le permitió arreglar el desastre que su imprudencia infantil había creado.

Usando mana blanco, comienza lentamente a sanar sus heridas, al menos a parar el sangrado y reconectar los músculos.

Karma Meelike se levanta y se transforma en reno. Su cabellera naranja brillaba con la fuerza del sol mientras que su cornamenta aún seguía llameando. 

-¿Por qué haces ésto? ¿Qué acaso no recuerdas nada? ¡Ellos mismos fueron los que te atacaron! La cíclope estaba envuelta en tu sangre, ¡seguramente fue ella quien te iba a matar! ¿No te culpa por la muerte de tu padre?

-No fui yo quien lo mató.

-¿Estás segura? Fuimos nosotras.

-No, fuiste tú. No somos la misma persona. Tú solo eres una impostora, un parche que el universo colocó bajo mi ausencia.

Karen Wolfran y la lealtad:
Estoy en deuda con ustedes solo por haberme escuchado, en verdad, si llegan a necesitar algo y esta a mi alcance, no duden en acudir conmigo, sea mucho o poco lo que necesiten o lo  que pueda hacer considérenlo hecho.


La gente de la que me rodeé siempre fue muy amable conmigo. Muy pocas veces en mi vida me han tratado mal, y por alguna razón, el karma actuó rápido. ¿Habrá sido ella siempre haciéndolos pagar por lo que me/nos hacían? La gente que me rodeaba siempre fue buena y agradecida, como Karen. Estuvo conmigo en estos días tan difíciles y lamento que nunca pudimos ser mejores amigas.

-Tú no entenderías. Siempre mantuviste la gente a raya. Como ese cool kid de Riga, estaba honestamente enamorado de ti, y dispuesto a reformar su vida por ti. Lo vi en sus ojos a través de los tuyos, y no solo lo rechazaste, sino que lo mataste porque te parecía cursi y aburrido. Mis profesores, mis amigos y mi familia son quienes me proporcionan fuerza y sabiduría, y es por eso que nunca serás yo.

Meelike se transforma en reno. Ambas mueven impacientes sus patas delanteras y se lanzan con las astas al frente.

El impacto fue fuerte. Los renos seguían luchando con fuerza mientras lanzaban fuego y hielo por todos lados. Las cornamentas de ambas estaban sangrando: la delgada piel de las cornamentas se rompía, así como los delicados vasos capilares, haciendo el espectáculo grotesco. Parecería que colgaran de sus cuernos pedazos de carne.

Karma Meelike tomo ventaja y fue capaz de lanzar a Meelike. Estando en el piso, Karma Meelike empezó a golpearla con sus coces delanteras.

Glendall Dikoudis y los valores familiares:
Yo te amo, hija mia, a ti y a tu hermano y a tu madre... y voy a hacer que no tengan que sufrir nunca un cobro de la vida como este...ya verás que me encargaré de arreglar las cosas...

Yo quiero vivir. Quiero estar aquí, aprender, descubrir, amar, llorar. Quiero completar esta experiencia completa. Aunque solo habría algo que me detendría. Mis padres. Daría mi vida propia por defenderlos de cualquier peligro, y estoy consciente que Karma Meelike es un peligro latente. No puedo permitir que ella sea la que salga con vida de aquí. Si para eso necesito sacrificar mi vida, que así sea.

Con llagas en su piel, Meelike hace un movimiento rápido con su cabeza golpeando la mandíbula de Karma Meelike, haciéndole retroceder. Jadeando, ambos renos se observan a la distancia. Karma Meelike se transforma en humana, y Meelike también, quien invoca su espada y comienza a caminar hacia su enemiga lentamente.

-Esto va a terminar. Hagámoslo rápido, lo puedo hacer indoloro si quieres.- dice Meelike en tono burlón mientras golpea su mano con arrogancia con su espada.

-No te preocupes... te voy a vaporizar yo a ti.

Karma Meelike junta sus manos mientras decenas de runas la rodean. Mana negro y mana amarillo rodean al ser obscuro y las runas comienzan a estallar, liberando muchísima energía cada una.

-No... no puede ser... una técnica prohibida...

Meelike se echa a correr lo más rápido que puede, para después despegar y volar. Karma Meelike reía a la distancia.

Mana negro + Mana Amarillo
*Forbidden Technique: Modified Supernova*

Meelike vuela lo más rápido que puede desesperada, mientras que Karma Meelike ha conseguido hacer una esfera de fuego incandescente de aproximadamente 70 metros. Un tanto diferente a la Supernova original, la Supernova Modificada se basa en mana negro y ataque de fuego en vez de luz, casi tan destructiva como la original.

Meelike se detiene y aún a la distancia podía ver la enorme esfera de energía roja a la distancia. Había que hacer algo. Esa esfera la seguirá hasta el final del infinito, así que había que recibirla de lleno, pero si no se usaba la técnica adecuada, moriría antes de que la esfera siquiera la tocara.

Eston Vahi y la humildad:
Desde hace mil años, nuestros antepasados, los saamis, se han ido desplazando a causa los vikingos, quienes matarían a los saamis para dominar sus territorios. Su idea era el exterminio y dominar toda Escandinavia y territorios más allá del Báltico. Volar estaba fuera de duda, pues los vikingos atacarían con flechas y catapultas. Habría poderosos guerreros renos que les harían frente, pero los vikingos eran tremendos guerreros que trabajaban en equipo. Los héroes fueron cayendo uno a uno. Eran los nahuales normales, los que no sabían pelear, quienes se organizaron. Haciendo uso de su mana amarillo, harían caravanas enormes a través de los lagos de Escandinavia hasta llegar a Laponia, el hogar de los actuales saamis. Al caminar juntos por el agua, fueron capaces de atravesar ríos, lagos e inclusive el Báltico. Era cuestión de trabajo de equipo. Acepta tu legado, hija, y acepta la ayuda de los que te quieren y están a tu lado.

Estoy sola, no hay nadie quien me ayude aquí, pero cuento con el apoyo de toda la gente que me quiere, que me apoya, que me ha enseñado a lo largo de mi vida. Hay gente que tiene esperanza en mí, sin exigencias, como mi padre.

Meelike detiene su vuelo y voltea justo para ver que la Supernova ya la estaba siguiendo.

-Por favor, Sleipnir, ayúdame. ¡Quiero vivir!- grita desesperada. Comienza a concentrar todo su mana amarillo y azul mientras espera a la esfera de lleno. 

Sleipnir escucha sus plegarias y un pequeño copo de nieve se materializa al nivel del pecho de Meelike.

Sybille Weinmüller y la protección:
Meeli, tú eres mi amiga y no me importa lo que seas, te quiero porque me haces reír y juegas conmigo. Te voy a defender siempre que pueda, pero debes aprender a que el lobo le tenga miedo a tu cornamenta cuando te defiendas.

Crecer como nahual místico en tierra darkha fue difícil en un principio, pero aprendí a defenderme. Pille lo hacía al principio porque yo me sentía vulnerable, como un extraterrestre en la tierra donde nací, pero con el tiempo aprendí a escabullirme yo solita y después a enaltecerme. 

Meelike inyecta todo su mana azul y amarillo en el pequeño copito de nieve, que comenzó a crecer hasta volverse en un escudo de aproximadamente 35 metros.

La supernova estaba por llegar y Meelike grita mientras usa todas sus fuerzas para fortalecer aún más el escudo que le proporcionaba el antepasado de todos los renos místicos. Finalmente, la supernova impacta.

Karma Meelike llega a la zona de impacto volando para aterrizar junto al cuerpo inmóvil de Meelike.

-¿Qué? ¿Lo logré? ¡Lo logré!

Karma Meelike grita de emoción mientras brinca y baila. Había vencido a Meelike... o al menos eso creía.

Meelike trata muy débil con todas sus fuerzas levantarse, solo para caer rendida al piso una vez más mientras su transformación termina: su cabello era perlado y sus ojos cafés una vez más.

-¡AY, POR FAVOR!

La ropa de Meelike estaba completamente desgarrada. Karma Meelike toma a su contraparte del cuello.

-Me tienes harta, pero era solo cuestión de tiempo que esto pasara. Te lo pedí de buena manera, pero ahora es tiempo de que mueras. 

Con su navaja, usa mana amarillo y transforma el instrumento moderno en una daga de aspecto ceremonial.

-Es el fin...

Iiris Vahi y el orden:
Meelike, yo se que Pille es tu mejor amiga ahora, pero cuando venga no quiero que vea este tiradero. La familia Weinmüller nos acogió e hizo el contrato con nosotros en esta maldita sequía. No somos humanos, somos nahuales, y en el mundo darkha hay mucho estigma hacia nosotros. Nos ven como bestias irracionales. Los Esna hacen contratos con las criaturas mágicas para tenerlos con vida pero muchos se están aprovechando de ellos y los hacen sus esclavos. Los Weinmüller lo hacen de buena gana y sin nada a cambio, pero si ellos ven que vivimos como animales, lo pensarán dos veces. No es difícil limpiar tu habitación. Primero, localiza el punto débil. Es dónde se apoya la mala vibra según el Feng Shui. Segundo, elimina fuentes nocivas. Recoge esos platos sucios y llévalos a la cocina; ponlos en la lavavajillas, ni siquiera los tienes que lavar tú. Tercero, pon todo en su lugar. Decidir que va primero y que va después parecería cosa fácil pero no lo es. No te digo que hagas esto ahora, tómate tu tiempo, pero una vez que tengas tu habitación limpia y a tu gusto, te darás cuenta que no hay marcha atrás.

Mamá, me volviste un monstruo obsesivo y ahora no puedo vivir de otra manera. Me di cuenta que todo tiene una lógica y un orden. Y esta no es la excepción.

-Primero... localiza el... punto débil.

Mana Rojo
*Ruber hasta*

Meelike mueve sus dedos índices desde el piso hacia adelante. Un grito de dolor escalofriante viene desde el interior de Karma Meelike, pues dos lanzas habían perforado sus piernas, justo arriba de las rodillas. Karma Meelike suelta a Meelike dejándola caer al igual que su daga.

-¡Maldita estúpida! ¡Te voy a matar!

Mana Azul 
Time....

Meelike mueve sus dedos una vez más invocando dos lanzas más que vienen desde el suelo hasta los hombros de su contraparte malvada, cancelando su hechizo.

Karma Meelike trata desesperadamente de teletransportarse pero el dolor es tanto que no puede hacer nada. Estaba competamente fijada.

-Segundo... elimina fuentes nocivas.

Meelike se levanta y toma las muñecas de Karma Meelike.

Mana Amarillo
*Ice Bending*

Meelike clavó diversas dagas de hielo a lo largo de los brazos de Karma Meelike, inclusive por sus manos. Podía sentir el calor de su sangre mientras su cabello se volvía negro y gritaba desesperada.

-Tercero... pon todo... en su lugar.

Meelike se agacha y toma la daga de Karma Meelike, quien la veía horrorizada. Su corazón latía a mil por hora. No podía creer que ella sería quien moriría. El mismo Universo la envió para poner orden en la Tierra y sin embargo, había sido vencida por una pecadora.

Casi en shock, Karma Meelike observa a Meelike, cuyo cabello estaba tan desaliñado que no podía observarle los ojos. Meelike en cambio, miraba la daga detenidamente. Duraron así un par de minutos, sin que alguna dijera nada, pensando cómo es que habían llegado a este punto. Meelike acomoda su cabello y observa a los ojos a Karma Meelike. Le dio pena, porque era su reflejo. Se preguntó si en realidad había diferencia alguna entre ellas.

Alan Oakley y el impulso:
Piensas demasiado las cosas, prima.

Hehe... claro que sí, vaquero.

Meelike levanta la daga.

-¡NO, POR FAVOR! ¡NO LO HAGAS!
-¡AAAAAAAHHHHHHHH!!!!!!!